Hay dos velocidades en la economía: una es la visible y mensurable, que está ligada a los sectores de grandes intereses tales como energía, combustibles, banca, grandes constructoras, que acompañadas de las Lebac y los bonos del tesoro hacen un tándem Estado-grandes intereses privados y que en su conjunto conforman la economía de los valores nominales sujetos a la volatilidad.

Esa es la economía nominal de la que se habla constantemente y que tiene asignado constantemente un valor que puede fluctuar de manera espeluznante, generalmente por razones de responsabilidad administrativa nuestra y pocas veces por razones lejanas a nuestros manejos.
Y la otra es la economía real, que va muy por debajo de la anterior, a otra velocidad. De esta se habla menos. En el cuerpo es la musculatura que produce el 42 por ciento del PBI (170.000 millones de dólares) y el 70 por ciento del empleo de la nación (7 millones de empleos directos y 4 millones de monotributistas y autónomos). Esta economía, que se mueve y sacude al ritmo de las variables instaladas por la otra, es a su vez distinta, es economía real porque transacciona bienes reales que tienen valores reales de mercado y están ligados por lo general a costos bastante ciertos de insumos materiales, industriales o naturales y a dosis ciertas de incidencia de mano de obra.
Hoy estamos nuevamente en una situación paradójica. Al ritmo enfebrecido de la economía volátil sucumben y se están muriendo minuto a minuto el empleo y la producción real y por ende se está desarticulando la economía real en su conjunto. Esta economía real es un verdadero entramado social, una red de seguridad que se estira más allá del límite de lo posible, límite por cierto muy superior al de la otra economía. Esta red está conformada por elementos y relaciones reales, dueños y empleados que se conocen hace tiempo, relaciones cliente-proveedor con una confianza real cimentada en el tiempo, proyecciones de negocios basadas en lo más básico, la subsistencia de los que conozco y quiero. Por otro lado, materias primas, procesos fabriles o servicios con más o menos empleo, mercadería con valor final o servicios apreciados por el mercado o los vecinos, red real porque asegura la conservación de la dignidad de los elementos intervinientes, red inclusiva que de crecer chupa los elementos del asistencialismo y los promueve a un estado superior.
Por último, es una red que por su naturaleza de superviviente tiene un potencial expansivo infinito y una capacidad de compromiso única, y jamás juega en contra del país. El problema es que estos daños no se ven hasta que la acumulación del deterioro le explota en la cara a la sociedad.
La macroeconomía y la microeconomía se rigen por leyes distintas. Por eso cuando la primera le niega ayuda a la segunda esgrimiendo que no dan los números, la está asfixiando y al hacerlo está destruyendo el 50 por ciento del PBI y el 70 por ciento de la generación de empleo privado. Además, la microeconomía no está expuesta a la volatilidad característica de la macro.
CUANDO EL MONETARISMO SE CONVIERTE EN IDEOLOGIA
Al generar un sistema integralmente agresivo para la supervivencia de las pymes se está destruyendo el tejido económico y social. Por otro lado, cada vez que se propone algún tipo de solución para el mundo pyme que implique algún recurso, la respuesta que se recibe es sistemáticamente negativa y se apoya en la macroeconomía. Se esgrimen objeciones basadas en un fundamentalismo monetarista macroeconómico, (la política monetaria deja de ser una herramienta y pasa a ser una ideología), arguyendo algo así: "lo que no es posible para la política monetaria, no es real", como si la única verdad, fuera la establecida por la dinámica de los grandes números. (Creo que este extremismo es infundado, que se verifican agujeros negros, zonas de confusión o grandes dudas a la hora de llevar esas certezas de la macro a la micro.)
Tal vez la macroeconomía pueda configurar los límites extremos de la economía pero no está ni cerca de explicar la vida interna y celular de la microeconomía y mucho menos de entender y proyectar su potencial. La política monetaria basada en la macro puede definir las dimensiones de la economía, pero no generarlas. Eso lo hace la economía real. De allí que el error esté en tratar de determinar el volumen desde una herramienta subjetiva que quiere imponérsele a la realidad. Sin embargo, la realidad se encarga una y otra vez de decir su verdad, de salirse del corset artificial, las más de las veces con una crisis social. No concibo entonces que se quiera gestionar la economía desde el tablero virtual de la macro porque la macro y la micro son dos realidades distintas que por momentos parecen operar en conjunto.
Una de las características para la cual la macro no está preparada es la urgencia. Las problemáticas de la pyme en el actual contexto es toda urgente, por eso la acción inmediata es necesaria para evitar más pérdida de empleo.
Por otro lado hay una incongruencia entre las leyes de la macroeconomía y la mecánica de la microeconomía así como hay una incongruencia entre las leyes físicas de la relatividad y la mecánica cuántica o entre las leyes de la física cósmica y la atómica. En ambos ejemplos hay leyes para las grandes dimensiones que no se verifican en las pequeñas proporciones. Así es como la física cuántica es el talón de Aquiles de la teoría de la relatividad. Por esa razón los físicos siguen buscando la partícula de Dios, el Bossom de Higgs, la variable cósmica, cualquier singularidad para encontrar la ley que explique ambos extremos de la realidad, la física cósmica y la atómica. Cuando Einstein descubrió las leyes de la física cósmica la gran desilusión que se llevó es que éstas no se verificaban en la física atómica. Por eso Einstein siguió buscando, sin lograrlo, una teoría que unificara todas las leyes.
La misma dinámica puede aplicarse a una relación entre la macro y la micro. La macro tiene una mirada radiográfica, es decir, ve la osamenta pero no la musculatura. Lo que pasa en el nivel de la pequeña unidad económica individual (musculatura) no parece tener efecto en el nivel macroeconómico, no parece verificarse una relación causa efecto entre ambos extremos.
Cuando uno le plantea a los economistas “a la micro hay que darle un crédito o bajarle la presión impositiva”, contestan indefectiblemente con negativas porque dicen que las fórmulas económicas indican que no hay una moneda.
Parecería que la micro está desconectada de la macro. O no se aplican las mismas leyes para ambos extremos o no se aplican siempre de la misma manera. Así por ejemplo el Estado logra bajar la inflación nacional pero a las micro/unidades les aumentan los costos (baja la inflación pero no sube el consumo) o el Estado aumenta el empleo y sin embargo muchos sectores van perdiendo empleos masivamente.
¿O sea que muchos retoques que se hacen en la Macro no alteran la Micro. ¿Cómo puede ser? La única duda es si se verificaran efectos luego de un gran plazo de retraso.
La gran pregunta cae de su peso. ¿Qué pasa entonces con la dinámica inversa? Los retoques que se hagan a la micro, ¿causarán o no efectos en la macro? porque si no lo hacen, ya se podría salvar gente. Y si hubiera efectos con un retraso importante habría tiempo para corregirlos después.
Los típicos argumentos para negar auxilio a las pymes son que no hay recursos o que el gasto público es tanto y no hay plata. ¿Se puede mantener la misma postura no hay con qué?
LO IMPORTANTE ES LO QUE NO SE VE
Hay muchos ejemplos en otras disciplinas donde se verifica que hay un universo menor desconectado o con sus leyes distorsionadas, respecto del universo mayor que lo contiene.
Se pueden establecer paralelos con lo que ocurre en esas disciplinas.
1. A nivel de escalas menores se comprueba que hay realidades distintas.
Por ejemplo, hay un concepto matemático que la psicología usa, que refiere a las leyes de los grandes números y los pequeños números. Dice que si se llena una valija con fichas de casino mitad blancas y mitad rojas y se sacan un número de veces de a 10 o 100 o 1000 o incluso 5000 fichas, es muy probable que salgan todas de un color y se infiera como consecuencia que toda la valija es de ese color. Así, en escalas chicas la realidad se distorsiona. Uno puede concluir, son todas fichas rojas, y tiene razón hasta un punto pero se está equivocando también. Así, si se hacen cortes menores, pueden sacarse conclusiones que habilitan realidades distintas. En muestras chicas los resultados no son los mismos que en muestras grandes y a veces representan realidades distintas o en ese momento directamente lo son. Esa es la diagonal que buscamos que permita ir retocando.
La matemática y física vs la macroeconomía
2. ¿Cómo mide la macro el efecto potencial de la micro si no cuenta con ninguna herramienta para hacerlo? ¿Cómo mide por ejemplo la capacidad de un emprendedor de armar un proyecto desde cero sin los recursos o las condiciones que habitualmente le exige un banco? ¿O cómo proyecta cuánto puede crecer una familia que arranca de cero sin crédito bancario y que arma una empresa donde con el tiempo llegan a trabajar 500 empleados? Mientras que la matemática sí tiene, con el tensor de richi, una herramienta para medir el potencial expansivo (que mide la curvatura de los espacios) desde la macro no existe la capacidad de medir expansiones posibles.
3. Además, un principio de la filosofía habla de subsidiaridad y bien común ligados a lo chico y a lo grande, a las grandes instituciones y a las pequeñas asociaciones que hay que permitir que vuelen y se desplieguen para materializar el bien común. O sea, el resultado armonioso del conjunto no se logra sin la superación o la mejor expresión de cada uno de los elementos que componen el conjunto.
Otro ejemplo
4. La masa oscura o energía oscura, todavía no se sabe bien lo que es, la llaman oscura porque no refracta la luz y por ende no se ve. Pero es muy importante porque se cree que es la verdadera razón que explica la velocidad de la expansión del universo. Esta velocidad es muy superior a la fuerza gravitacional que ejerce la masa visible (ej. los planetas). O sea que hay una cantidad enorme de masa, muy superior en volumen a la que vemos, que los últimos descubrimientos indican que consistiría, curiosamente, al igual que la microeconomía, en una infinita gran red de filamentos. De nuevo, lo que motiva el movimiento no se ve. Hay una parte gigantesca que no se ve y sobre la que nadie trabaja.
Universo pyme: un sistema de resultados exponenciales
Es un efecto multiplicador en donde existe una inercia económica. Hay una consecuencia exponencial de resultados que no se estudia, hay una reacción de este universo pyme, micro, cuántico, que no se analiza nunca, es su verdadero poder transformador, puede cambiar todo con una fuerza que siempre estuvo.
Como prueba comparemos el nivel de endeudamiento financiero total del universo pyme que es en función a los datos del BCRA USD 6.500 millones para producir USD170.000 millones (42% del PBI). Por cada peso prestado genera 26 pesos de PBI.
Las grandes compañías deben USD 24.000 ( fuente BCRA) para producir USD 52.000 millones (13% del PBI). Por cada peso prestado generan 2 pesos de PBI.
La diferencia es abismal, los resultados del universo pyme son exponenciales.
OPERACIÓN DINAMO, UN PAQUETE DE MEDIDAS INMEDIATAS.
¿Cómo se mide el entusiasmo o la motivación en términos de formulación económica? En los países desarrollados hay una economía que atiende esto y por eso la gente no lleva garantías y puede avanzar. Hay como una decisión de la autoridad que dice la voy a apoyar. Hay una reglamentación que sostiene las pymes y que le da apoyatura. Acá si uno se cae de la red, se derrumba.
Por eso este es el momento de hablar de otra convergencia, la de la economía real con la supuesta solución de la economía nominal, una convergencia mucho más productiva que le ayudaría al Estado a absorber el asistencialismo, reducir el gasto público, aumentar la oferta con la consecuente reducción de la inflación.
El gobierno, en donde las variables macroeconómicas no muestran una salida, lejos de lo que está haciendo hoy, debería apalancarse en donde los efectos expansivos son exponenciales. Debería cambiar ya, al modo pyme, pasar a respaldarse en la economía flexible, adaptable, ágil y real.
Pero sobre todo es una economía comprometida, porque va en ello la vida de los seres cercanos y queridos de los protagonistas.
Esta es la economía que más rápido puede reaccionar si se le suministran uno o dos recursos que la desahoguen. Y no necesita mucho, solo pequeños empujones dosificados que la pongan en un movimiento continuo.
Es la economía que puede más rápidamente tomar gente e incluso succionar gente si fuera el caso, del asistencialismo, porque no requiere inicialmente una capacitación muy sofisticada, ni conocimientos muy específicos, ya que son tareas más básicas las que se realizan en ese universo.
Este universo, del 70 % del empleo nacional, necesita un desendeudamiento total, fiscal y financiero, inmediato, con el solo fin de frenar el exterminio, que las actuales variables macro están generando en este sistema. Solo luego se podrá pensar en el crecimiento.
Lo ideal y tal vez más justo dada las condiciones financieras de los últimos años y la tremenda carga tributaria y la crisis extrema que pesa sobre la actividad económica, seria la condonación de ambas deudas, pero sino se condonan por lo menos debe haber para la deuda financiera algo parecido a la moratoria fiscal con un plan no menor a 10 años y una tasa no mayor al 3% anual. Esto debe estar precedido de una suspensión de ejecuciones judiciales para proteger los patrimonios y emprendimientos de manera que lleguen intactos a esa condonación o moratoria.
Además, hay que destinar fondos a la operación corriente, el capital de trabajo, bajando significativamente el costo financiero para mantener el volumen de la actividad. Para este ítem el cálculo es otros USD1.000 encauzados vía las SGR que podrán avalar el equivalente a USD 4.000, o sea un 30 % extra del actual financiamiento total.
Todo esto, que se entienda bien, no es necesario porque las pymes son desordenadas o no tienen disciplina fiscal. Para el que conoce o vive el mundo pyme y sabe que el 100 % de su capital de trabajo es prestado, estas medidas son imprescindibles porque llevan más de tres años pagando tasas cercanas al 90% y mas sobre todo su capital de giro. Eso significa que en los últimos tres años han pagado su deuda entre 2 y 3 veces y aún deben el 100% del capital….
Además hay que analizar de una vez la posibilidad de reducir la carga tributaria al universo pyme. La actual carga es impagable y la prueba es que la economía informal está cerca del 50%.En ese estado de sangría es imposible hacer frente a una carga impositiva, como la actual, y organismos recaudatorios voraces.
Otra cosa imprescindible, si queremos que vuelva a crecer el empleo, es reducir fuertemente el costo laboral no salarial. Ese costo se lleva mucho de los posibles empleos.
Por ultimo hay que tener el coraje de reformular la ley de despidos. La situación actual es aterradora, nadie incorporara, salvo contadísimas excepciones, nuevos empleados.
Con estas decisiones el universo pyme va a reaccionar, más antes que después. Primero sostendrá el empleo y luego lentamente ira por más de manera que la economía real le dará muy gratas sorpresas a la conducción económica.
Por último sería una apuesta novedosa. Vivimos sujetos a las consecuencias de la volatilidad del poder político. Hace poco el presidente tenía esto de aceptación y hoy bajó a esto. ¿No será porque dicho poder se mueve solamente en la esfera económica de lo nominal y volátil? y cuando pasa cualquier cosa vuela por el aire y pierde todo? Seguro que si consolidamos la economía real el poder político perderá volatilidad.
Operación Dynamo
Evacuación de Dunkerque
El milagro de Dunkerque
A principios de la segunda guerra mundial 400.000 soldados aliados quedaron aislados, en las playas contiguas al puerto de Dunkerque, entre los ejércitos A y B alemanes y el mar en el canal de la Mancha.
Eran bombardeados desde tierra adentro por la artillería y desde el cielo por la aviación, el desastre era inminente.
Planear la evacuación de tantos hombres parecía imposible, para colmo el puerto había quedado inutilizado por los bombardeos y por la misma razón había muchos barcos hundidos en las proximidades de la playa, lo cual imposibilitaba el acceso fácil y rápido para entrar cargar gente y salir. Para colmo de males el mar tenia baja profundidad y no permitía acercarse a las naves de gran calado que estaban en las inmediaciones y eran capaces de transportar mucha gente.
Eran 40 destructores y 100 buques mercantes que miraban impotentes la masacre hasta que llegaron “los pequeños barcos” fueron aprox 800 embarcaciones, mayormente pesqueros y de recreación que piloteaban sus dueños, civiles, que salieron de toda la costa cercana de Inglaterra a auxiliar y velozmente entraron y salieron, varias veces, hacia y desde las playas hasta las grandes naves donde transbordaban a los soldados.
Aproximadamente 340.000 soldados fueron evacuados con este sistema, lo que se consideró una hazaña y un milagro dada la situación.
Solo los pequeños actores tuvieron la cintura y la agilidad en condiciones tan extremas.
Y siempre tienen y tendrán el mismo compromiso con su país.